El pasado 5 de marzo Nueva York (cómo no) fue testigo de algo que la humanidad ha buscado desde hace aproximadamente 100 años. Y más desde que cada uno tenemos nuestro coche y los atascos aparecen por doquier. Un coche levantó el vuelo durante 37 segundos y aterrizó sin problemas. El futuro, por fin, ha llegado.
No creo que sea el único que pensó que con el nuevo siglo nos habían timado. Desde que vimos la saga de Regreso al Futuro nos habían prometido coches voladores para el año 2000 y aquí, a no ser que sean invisibles, no habíamos visto ninguno. Pero esto ya no nos preocupará más (bueno, sí, que a saber cuando estará disponible el invento y a qué inaccesible precio), porque la Aviación Federal ha creado esta especie de híbrido entre coche y avión, que hace las veces de coche, y hace las veces de avión.
Puedes ir con él por la carretera gracias a su motor de 100 CV, que funciona con la gasolina de toda la vida. Y si ves que a dos kilómetros va a haber atasco, desde el mismo asiento del piloto activas las alas y el sistema de avión y te dedicas a sortear cualquier obstáculo a ras de suelo. Su tanque de unos 50 litros te permite volar hasta más de 700 kilómetros a algo menos de 200 kilómetros por hora, que no está nada mal. Además, la transformación (a lo Optimus Prime) no te lleva más de 30 segundos.
Y lo mejor de todo es que si vas pilotando y te encuentras con una tormenta de esas odiosas, es tan fácil como aterrizar en el aeropuerto más cercano, teniendo cuidado de los Boeing 747 y los Airbus 380 (¡abusones!) y conducir plácidamente hasta que las nubes malvadas de hayan ido.
Originally posted 2009-03-25 19:44:01.